Simplemente cajas.

Siempre queda algún collar o algún par de pendientes que no queremos guardar con el resto. Vale la pena tener alguna cajita algo más pequeña para esos "tesoros".


Un par de ejemplos para jugar con los colores- Combinar tapa pintada con caja estampada o al contrario, según nos guste más.


El interior no es demasiado espacioso; de eso se trata, un pequeño lugar para que la joya tenga intimidad.